Decirle adios al adios
by Florent Pagny
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Quizás no es el momento para hablar
Ni decir adiós,
Quizás los sentimientos están
Devorados por la paz de la rutina
Que asesina al corazón
Y nos deja sólo espinas
Que lastiman la ilusión.
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno,
Será porque es mejor
Decirle adiós al adiós.
A veces el silencio es mejor
Que la distancia
Y a veces los recuerdos se van
Y regresan como sombras que se quiebran
Con la fría soledad.
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno,
Será porque es mejor
Decirle adiós al adiós.
Al rencor, al dolor
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno.
Será porque la vida permitió
Que tú y yo podamos
Decirle adiós al adiós
Ni decir adiós,
Quizás los sentimientos están
Devorados por la paz de la rutina
Que asesina al corazón
Y nos deja sólo espinas
Que lastiman la ilusión.
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno,
Será porque es mejor
Decirle adiós al adiós.
A veces el silencio es mejor
Que la distancia
Y a veces los recuerdos se van
Y regresan como sombras que se quiebran
Con la fría soledad.
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno,
Será porque es mejor
Decirle adiós al adiós.
Al rencor, al dolor
Si aún no se apaga la luz
Que encendimos los dos
Desde el primer beso,
Será porque la luna está de nuestro lado.
Si aún nos recuerda la piel
Cada instante de ayer,
Cuando éramos sólo uno.
Será porque la vida permitió
Que tú y yo podamos
Decirle adiós al adiós